Del 9 al 14 de Diciembre.-
Pablo embarco en un barco para la ciudad de Sidón. Era invierno y la navegación era difícil, la única forma era hacer una parada en la isla de Creta. Viendo el mal tiempo, Pablo les aconsejo que se quedaran en la isla hasta que el tiempo mejorase, pero no quisieron escucharlo y siguieron el viaje.
De repente Chua!!! Aconteció un tremendo temporal, un terrible huracán en altamar. El viento comenzó a empujar el barco con violencia y perdieron la embarcación. Ellos hicieron de todo para no hundirse, y hasta tiraron afuera toda la carga del barco, pero de nada sirvió. Los tripulantes del barco estaban asustados, y sin esperanza de salvarse. Imaginen el gran alboroto que había en aquel barco, moviéndose bruscamente de un lado a otro.
Entonces Pablo se puso de pie y dijo: ustedes deberían haberme escuchado y quedarse en la isla así no sufrirían estos perjuicios. Pero tengan coraje, nadie ira a morir, solamente perderemos el barco. Los tripulantes se preguntaban como el podía tener tanta seguridad en lo que decía. Es que el angel del Señor había dicho a Pablo que el iría a la presencia del emperador de Roma, y que Dios con su infinita bondad salvaría a todos los que viajaban con el. Ven que maravilla niños!!! Porque Pablo estaba en aquel barco, la vida de todos seria rescatada. Pablo animo a todos y les aconsejo que comiesen porque hacia días que nadie comía. Pablo tomando el pan lo bendijo y repartió para todos. Al amanecer la nave choco y empezó a quebrarse con la fuerza de las olas. Había doscientas setenta y seis personas en el barco, y los soldados querían matar a los presos para que no se escapasen. Pero el guardia queriendo salvar a Pablo no dejo que lo hicieran. Vean solo niños como una vez mas, por la fidelidad de Pablo, nada de malo le aconteció. Como es bueno ser fiel a Dios, no es así? Fue dada la orden para que todos saltaran a las tablas y nadasen hasta la playa. Ufa! Ellos nadaron, nadaron, conforme Pablo lo había dispuesto, todos llegaron salvos a la playa.
Gracias a Dios los habitantes de aquella isla los recibieron con mucha bondad y hasta hicieron una hoguera para calentarse del frio. Pablo estaba recogiendo unas maderas para la hoguera cuando de repente grito. Una cobra le había picado. El sacudió la cobra y la lanzo en la hoguera. Los habitantes de la isla miraron asustados y pensaron que el moriría, pues la cobra era venenosa y fatal. Los prisioneros y el pueblo de la isla escucharon atentamente la predica de Pablo, por ver el gran libramiento de Dios en el mar y la picadura de la cobra. Mas tarde Pablo visito un hombre que estaba enfermo y lo curo en nombre de Jesus. Viendo esas señales todos los enfermos de la isla lo buscaron.
Días después, Pablo y los tripulantes partieron a Roma, y alla hablo de Jesus para las personas. Pablo confio de Dios cuidaria de el y El lo cuido.
CONCLUSIÓN: Pablo fue un valiente soldado de Cristo, que llevo la Palabra de Dios para todos los lugares y guardo la fe hasta el fin. Nada y nadie consiguio desanimarlo, ni hacerlo desistir de predicar el evangelio. Dios desea usarnos para hablar de su Palabra para otras personas, asi como uso a Pablo, y El estara con nosotros en todos los momentos ayudandonos y librandonos de todo mal que intente impedir que este plan se cumpla.
Pablo fue un hombre muy usado por Dios, y necesitamos tambien desear ser usados por El asi como Pablo, amen?
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